viernes, 24 de octubre de 2014

Dialogando antes de dormir



Descansa un rato joven impaciente,
Tan solo mira hacia un cielo imaginario,
dentro de cuatro paredes:
en él; donde atesoras todos tus bienes.

Constantemente reflexiona,
y mientras recuesta tu cabeza
sobre la almohada; placidamente.
Constantemente reflexiona;
mientras la quietud gobierna tu espacio.

Descansa joven impaciente,
inconforme por lo errores de tus pisadas,
por los vacíos restantes,
por los quebrantos profundos.

Mira hacia el cielo real,
el cual el divino pintor creo para ti,
aprécialo y da gracias,
para que nunca desvanezcan tus fuerzas.


Y puedas dormir finalmente,
sin reproches,
sin tristeza;
con tierno gesto,
con sutil esperanza.

(Escrito en el 2008, fragmento)