miércoles, 16 de abril de 2014

Homenaje y desapego



Un beso en la frente
para amenizar
tus historias
y versos tenues
antes de dormir.

Un beso en la frente,
luego cerré mis ojos
y escuche tu canto a lo lejos.

Como hablabas
entre tus sueños
y fantasías,
entre presuntos cuentos
y relatos de amor,
escuché de cerca,
sentada como
una niña, escuché.

Una distancia no basta,
sino un adiós,
te suelto y me sueltas
antes de un comienzo
un final, sin lagrimas,
sin lamentos por contar.

Solo enseñanzas atesoradas,
solo memorias que libero
nacidas de un pensar
que me hizo un día
idealizar esa eterna expresión
en multiformes rostros.

Evocación a la ilusión de adolescencia



Te recordé por un instante,
como en aquellos años
de simpleza inagotable
te recordé y eras justamente el mismo.


Te volví a observar detenidamente
como en esas noches de desvelo
cuando me preguntaba
largas cuestiones raídas
en el tiempo y en el crecer.
Te volví a observar y seguías siendo el mismo.

Recuerdo como te cantaba aún
sin conocer el estruendo y silencio
de tus emociones, de tu amar .
Recuerdo todo ello, y siento
como si el tiempo estuviese encapsulado.


Todo ello, pasó aun sin ser,
aún sin rendirme con la espera,
de una epifanía tan pura;
como la cándida esencia
que alguna vez dibujó con sus
ojos cerrados, la ilusión de recibirte
cuando tocaras a mi puerta.

martes, 1 de abril de 2014

Aprendizaje y Cambio



Enséñame a volver a la ilusión
a cultivar como flores mis pasiones.
Enséñame a desear vivir situaciones,
eventos que de tiempo en tiempo, aparecen.

Acompáñame a meditar por un instante,
quizás de día o en el silencio de la noche,
en aquel viejo libro bordado con dudas
que aún vive como la hierba bajo escombros.

Y tal vez, con lento esfuerzo
pueda contener el sentimiento
que ameniza mi alma
cuando recuerdo lo incierto de mi porvenir.