Miré detenidamente mi pasado,
al instante encontré
viejos retratos de emociones y
erotemas innecesarios que a mí se encarnaron.
Mire y oí saludos vagos,
muchos corrían como autos a
gran velocidad;
pero pocos se detuvieron a conversar,
pues sus destinos eran de suma importancia.
De pronto, como si faltase la cordura, un esbozo
de sonrisa encontré y al
instante desvaneció,
no pude identificar bien su autor o alguna de sus huellas.
Luego comprendí que fue producto de una ilusión.
Miré en aquel momento y lo
sigo haciendo,
sin saber, en mi búsqueda algo
útil o solo desechos encuentre.
En tanto, se contradicen mis expectativas
y aun no aparece nada concreto.
Solo espero, después de ello,
no hundirme en desasosiego,
ni marchar mi nombre con falsas faenas.
Solo quiero apreciar serenamente,
Incluso si no hubiese,
alguna melodía, una
que a mis oídos susurró paz y ternura.
(Escrito una vez, en medio de tiempos grises)
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